Daniel Orellana. Opina: Y que mismo fue??

Un gran amigo esta estudiando en Holanda, y quiero compartir una gran reflexión. Espero que sea de su agrado y la sepan disfrutar y compartir.


Por Daniel Orellana.




Ya que todo mundo opina sin tener ni la más p. idea, yo también voy a dar mi opinión, desinformada, sin fundamento y a larga distancia...


El jueves el presidente mete la pata en la cagada de un grupo de policías que no tenían mucha idea de qué era lo que querían. Como estaba ocupado gritando, se resbala y se parte la pierna y la compostura (las dos ya las tenía un poco partidas).  Cuando logran meterle en un hospital, los policías se dan cuenta que sería buena idea de que mejor no se vaya hasta que no haga algo (aunque seguían sin saber muy bien qué cosa). La cagada en la que se resbaló salpicó a los policías quienes comenzaron a preguntarse si la cagada es de ellos o de otros, más grandes, que no les gusta mucho ensuciarse y que se han limpiado con el país durante décadas. Pero ya era demasiado tarde, estaban salpicados hasta el cuello. El olor atrae a otras moscas a la miel-da, que no desaprovechan la oportunidad para llamar desde Brasilia a la rebelión y a la disolución del gobierno. Creen que tienen chance de comer un poco, pero lo único que consiguieron comerse son los mocos. Los otros, esos más grandes, los dueños de la cagada, se quedan calladitos, no porque les callan sino porque esperan a ver en qué plato meten cuchara. Aparece el soldadito mayor y dice que juega del lado de los buenos y hay un respiro de alivio generalizado: Todo va a salir bien. Pero no, no salió bien. Nos matamos, nos matamos entre todos.

Entre los policías habían policías que no eran policías y que encendieron los ánimos y provocaron los primeros disparos que nos mataron. Los soldaditos, que jugaban del lado de los buenos, no se les ocurre mejor cosa que devolver los disparos y seguirnos matando, a pesar de que tenían orden de no disparar. Un hombre cae al suelo y cuando tratan de rescatarlo, los rescatadores se encuentran con más tiros. Nos seguimos matando. Una ambulancia logra recoger a otro herido y una patrulla de policía la persigue a tiros. Nos seguimos matando. El cálculo es rápido para el presidente una vez que ha sido liberado. Convierte una pérdida en una ganancia. Demuestra que es fuerte y decidido, y que nadie le va a decir ni cómo ni cuando. Además aprovecha para darles tres en el rabo a los que está tratando de educar, un palazo en los dedos a los que está tratando de convencer, y un toque de gracia a los que está tratando de eliminar. Pero no dijo ni mu sobre su propia responsabilidad. Porque cuando un presidente dice "mátenme si quieren" tiene que recordar que hay gente que se pone entre él y las balas. Nos seguimos matando.

Y la pena y la rabia se mezcla con la impotencia de ver esa asamblea, que parecía nuevita y ya se nos ha gastado, que entre los rotos de su nombre deja ver al mismo viejo y feo congreso que es, esa asamblea nos mató a todos por su incapacidad de hacer nada. Por que sí podían haber hecho algo, porque para eso les elegimos. Porque tuvieron el chance y nos fallaron, porque luego de todo el lío tuvieron otro chance y nos volvieron a fallar. Será que el palazo en los dedos les dolió y le tienen miedo al profe. Alguna esperanza me queda, alguna esperanza que entre los cientos de personas inteligentes y capaces que forman parte de este gobierno, tengan la lucidez suficiente para evitar caer en el mismo juego contra el que han prometido pelear. Para que sean capaces de generar hacia adentro y hacia afuera ese entendimiento que tanto necesitamos. Alguna esperanza me queda.

Tengo cabreo, tengo tristeza y tengo cariño por este país.

Perdón por la catarsis,
Daniel.

PD. Para despejar las dudas y que no pierdan tiempo tratando de adivinarlo: Me considero progresista, creo que este gobierno ha hecho más cosas reales por el país que todos los anteriores desde que tengo memoria, y creo que todos debemos reconocerlo. No me gusta el estilo de Correa, no me gusta ni su estilo de confrontación ni su miopía política de centralizar todo creyendo que va a durar para siempre. Creo que todos debemos reconocerlo.

Comentarios

Santiago ha dicho que…
Casi casi que completa la percepción de Don Diego, solo quizás le faltó el que hubo muchos de los "buenos" a los que él llama, que estuvieron poniéndose a la orden del Vice en esos momentos, solo para más tarde aparecer de "figuretis", intentando abrazarlo y felicitarlo a Correa. Ya luego complementaría esa percepción, con todo lo sucedido desde el día siguiente al 30-S, y que solo nos deja más "frejados".

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